miércoles, 12 de mayo de 2010

Los videojuegos no son cosas de niños

Largas horas frente a una pantalla esquivando balas, infiltrándose en terreno enemigo o matando zombies ya no solamente es para niños o adolescentes. El mercado de los videojuegos hace rato que se dio cuenta lo atractivo que pueden ser estos juegos no solamente para ese segmento, sino también para los adultos. Y jugar no solamente es entretenido, sino también altamente adictivo.

De acuerdo a una investigación estadounidense realizada por el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) la edad promedio de las personas adictas a los videojuegos sería de 35 años. Si bien su perfil es bastante definido (personas tímidas, poco sociables y mayoritariamente hombres), los resultados del estudio no dejan de ser algo un tanto inesperado para quienes creen que los videojuegos son solo para niños o adolescentes con exceso de tiempo libre.

Estudios sobre el tema hay tantos como conclusiones sobre el asunto: que los videojuegos incitan a la violencia, que son adictivos y también estudios que revelan todo lo contrario. Los videojuegos son relativamente nuevos, por lo que en sí hay acuerdo es que es un campo se estudio bastante nuevo que aún no permite tener conclusiones claras sobre si efectivamente tienen un grado de incidencia en el comportamiento de las personas y si efectivamente son adictivos.

La aparición de nuevas consolas y tecnologías también han permitido que la experiencia en el videojuego vaya cambiando lo suficientemente rápido como para convertirse en un obstáculo para los investigadores: no es lo mismo jugar con un Supernintendo, que con un Nintendo Wii. Los fabricantes de consolas y videojuegos van buscando nuevas maneras de hacer el juego más interactivo y la experiencia en sí más real para los usuarios. Los videojuegos más famosos ahora tienen sagas de películas (Resident Evil o Tomb Taider) y casi todas las grandes producciones hollywoodenses tienen sus versiones para PC, PlayStation o Nintendo 64 (El Señor de los Anillos, Matrix o Harry Potter).

La pregunta de fondo es transversal a todos estos temas, ¿cuál es la importancia que tienen los videojuegos en nuestra sociedad? Mueven millones de dólares y millones de personas alrededor del mundo. Las colas para comprar la última versión de una consola son igual de enormes que las de los grandes estrenos del cine y provocan reacciones totalmente diferentes en todos los sectores de la sociedad.

Ya sea que uno los ame o los odie, los videojuegos y su imperio de millones y millones están aquí para quedarse. Y su influencia en los medios y la sociedad está lejos de ser un tema resuelto.

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